Biba er bló

- Me escondo bajo una barrera infranqueable, nada puede dañarme, nada puede penetrar a mis recónditos jardines. ¿Quien te crees que eres para presentarte ante mi puerta y llamar golpeándola con violencia?. Si quieres pasar no hagas ruido, llama cantando una armoniosa melodía. Y aun así, veremos si pasas, ¿has dejado tus sucias botas llenas de barro del largo camino a la entrada o piensas ensuciarlo todo al pasar?. ¿Vienes limpio, aseado, afeitado?. ¿Traes como carta de presentación una sonrisa o una lagrima?. Tal vez vengas embriagado y por eso tu lengua fluye como una catarata.

- Si llamo violentamente es para que me oigas, tal vez estés durmiendo o distraída, quiero entrar silbando. Vengo con barro en mis botas, es mi barro, son mis botas y a todas partes me acompañan, ¿como voy a caminar sino?. No voy limpio, ni aseado, ni afeitado, ha sido un duro camino entre alimañas de todo pelaje, no he tenido tiempo de acicalarme ni descansar. Mi carta de presentación es una lágrima de felicidad sonriente. Vengo embriagado, he tomado todos los vinos que encontré para combatir el frío hasta llegar a tu cálido jardín.

- Vale, pasa...

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